Parece ya una norma no escrita dentro de las bases que rigen la participación a los Premios Goya y es que de unos años para acá viene siendo una constante el que intérpretes veteranos, de conocida trayectoria cinematográfica, aspiren al cabezón en la categoría revelación. Algo que se ha intensificado en los últimos años al estipularse claramente el que si un actor o actriz no había recibido nominación alguna a los Goya en años anteriores, sería susceptible de poder ser candidato en las categorías revelación. La polémica, para los inconformistas de pro, está servida. Sin embargo, echando un vistazo al asunto desde el lado positivo, que lo hay, con esta resolución se permite a intérpretes hasta el momento ninguneados en las nominaciones aspirar por primera vez a un premio al que no hubieran logrado ser nominados de competir en otras categorías, llamémoslas estándar (principal y secundaria), debido al numeroso plantel de candidatos importantes que siempre optan a ambas. En esta 28ª edición de los Premios Goya, se ha vuelto a cumplir con la tradición de nominar en la categoría revelación a un intérprete ya firmemente curtido, así como también la de incluir en la liza a un conocido personaje público procedente de la televisión, quizás para captar más atención mediática para la pertinente ceremonia.
Patrick Criado, por La gran familia española.
1 Nom/0 Prem. PALMARÉS PREVIO: 0 Noms.
En nuestras quinielas previas a esta categoría siempre lanzamos una baza a favor de Miquel Fernández en representación de La gran familia española y le veíamos pocas posibilidades de éxito al joven y televisivo Patrick Criado, primeramente por vérselas con su compañero de reparto, pero también por formar parte de una generación de actores, el bien llamado relevo generacional del cine español del futuro, a la que también pertenecen Arón Piper y Igor Szpakowski y a los que considerábamos con mucha mayor ventaja en la carrera por el Goya. De las 11 nominaciones recibidas por la cinta de Daniel Sánchez Arévalo, la de Criado es una de las que mayor sorpresa nos generó, precisamente por los motivos antes expuestos. Ahora que la nominación es un hecho, el joven Criado no lo tiene nada fácil. Estamos de acuerdo en que el actor se beneficia del loable nivel interpretativo contenido en La gran familia española, dando de sí un trabajo que rebosa naturalidad y frescura, para nada alambicado, sosteniendo no sólo la relación romántico-adolescente a tres bandas situada en el centro de la película con admirable tesón, sino también logrando no quedar reducido a escombro en las escenas compartidas con el resto de ilustres y expertos veteranos. Sin embargo, y a pesar de representar a la película con mayor número de nominaciones del año, Patrick Criado parte con desventaja al no ostentar una condición clara de favorito, como evidencia el que, frente a sus tres contrincantes, es el único que no figura nominado a ningún otro premio cinematográfico de la temporada.
Hovik Keuchkerian, por Alacrán enamorado.
1 Nom/0 Prem. PALMARÉS PREVIO: Medallas del CEC (Nom.).
Favorito en la categoría desde el mismo estreno de la película, allá por el mes de abril del pasado 2013, la aparición en el último tramo del año de nuevos e importantes contendientes nos hizo pensar que sus posibilidades de llegar a la final habían menguado. Sin embargo, aún cabía la posibilidad dada la inclusión de Alacrán enamorado entre las cuatro pre-seleccionadas a los Oscar por parte de la Academia. Con 4 candidaturas, la película de Santiago A. Zannou se ha visto resarcida del injusto olvido padecido en su carrera comercial, pero Keuchkerian tampoco puede presumir de ser el favorito en esta categoría, aunque sería un justo y moralmente válido vencedor, sobre todo por la naturalidad y el dinamismo con el que lleva a cabo todo su trabajo en la piel de ese entrenador de gimnasio, honesto y leal, de contagiosa humanidad este exboxeador, campeón de España de los pesos pesados, poeta, monologuista y ahora actor en pleno auge, pues ya tiene lista su siguiente película y en calidad de protagonista. Dato que señala que el futuro próximo de Keuchkerian en el cine español se avecina sólido y con relativa continuidad, lo que podría inclinar la balanza del Goya a su favor.
Javier Pereira, por Stockholm.
1 Nom/0 Prem. PALMARÉS PREVIO: Medallas del CEC (Nom.).
Retomando la introducción, Javier Pereira ha sido designado por los productores de Stockholm en el apartado revelación, acogiéndose a la cláusula en las bases que admite tal posibilidad siempre y cuando el intérprete no haya sido candidato a ningún Goya previamente. Con opciones también, aunque limitadas dados los contendientes, en la categoría principal, este veterano ha logrado por la cinta de Rodrigo Sorogoyen la nominación que ya hubiera merecido hace bastante tiempo, por cintas como Heroína (2005), de Gerardo Herrero, o Tu vida en 65' (2006), de María Ripoll. No obstante, se hace obligado aplaudir el estratégico cambio de categoría pues, de otro modo, nos tememos que el trabajo de Javier Pereira se hubiera quedado fuera de las nominaciones y hubiera sido una verdadera lástima y es que en Stockholm el intérprete se marca la que, con diferencia, se debe contar ya como su mejor interpretación para el cine. Despliega primeramente un contagioso encanto, derrochando sensualidad a través de una mirada de fingida inocencia y una sonrisa que, cual zorro, se sabe arma infalible para conseguir sus propósitos; para luego desvelar sus cartas atropelladamente y acabar estampando en la pantalla la idiosincrasia necia e incongruente de un auténtico capullo acosado en su propio hogar, deseoso de salvaguardar su espacio vital y su territorio personal. Un empeño que Pereira, literalmente, borda, en uno de los, además, mejores títulos del año, siendo el único de los candidatos que ostenta la condición protagonista de su película. Por todas estas razones, Javier Pereira debería partir como el máximo favorito al Goya revelación 2014.
Berto Romero, por 3 bodas de más.
1 Nom/0 Prem. PALMARÉS PREVIO: Medallas del CEC (Nom.).
Aunque cabía la posibilidad, no nos creíamos que la candidatura de este conocido cómico televisivo pudiera pesar más para los académicos que las de otros intérpretes con empeños magníficos en importantes producciones (el mencionado Fernández de La gran familia española, o el Jaime Ordóñez de Las brujas de Zugarramurdi, de Álex de la Iglesia). Pero así ha sido. Y no sólo los académicos nos han dejado con la boca abierta con esta decisión, sino que el mismo Círculo de Escritores Cinematográficos ha incluido entre sus nominados al premio revelación el simpático y carismático empeño llevado a cabo por Berto Romero en 3 bodas de más, de Javier Ruiz Caldera, en sólo tres secuencias, en las que el actor ejercita con indulgente campechanía una locuaz y ácida verborrea, dando vida con prestancia a ese soso e impresentable exnovio enemigo acérrimo del matrimonio, que lleva a cabo a través de una reconfortante gracia personal, aunque sin lograr apartar al espectador del obvio guiño extracinematográfico que supone su presencia en la pantalla. Un hándicap que le resta opciones, unido al hecho de que de los cuatro finalistas, es el único con menor tiempo en pantalla y, además, por una intervención que se puede tildar, por comparación con las anteriores, de fácil y simplista ejecución.
Debería ganar: Javier Pereira, por Stockholm.
Ganará: Javier Pereira, por Stockholm.
3 comentarios:
Muy buen artículo, pero creo que lejos de juicios personales a cada una de las cintas, nos haya gustado o no, creo que es muy notable que el mayor peso interpretativo, además de resolver un papel más complejo es el de Hovik Keuchkerian por Alacrán enamorado y muy probablemente se lo lleve él.
Keuchkerian sería un digno ganador de este Goya, pero que no premiasen a Pereira rozaría el desastre...
Totalmente de acuerdo. Miquel Fernández se merecía la nominación mucho más que Patrick Criado, y Berto Romero... Desde luego Javier Pereira se lo ha ganado y ojalá no sea el único premio que se lleve Stockholm.
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