¡¡Ya es viernes!! Terminamos febrero y justo el fin de semana previo a la emocionante entrega de los Oscar nos llegan a las carteleras títulos con cuentagotas. Vamos, que este humilde servidor no recuerda haber vivido en un fin de semana en el que tan sólo 4 (sí, sí, 4) títulos se incorporasen a las marquesinas. Eso sí, 4 títulos de "agárrate y no te menees".
Empiezo el repaso por la más esperada no ya sólo de las cuatro cintas que llegan hoy a los cines, sino también de la temporada. Sobre todo de la temporada de premios que estamos a punto de finalizar. Y no es otra que La invención de Hugo (Hugo), la cosa más rara que hayamos podido esperar (e imaginar) nunca de la mano de Martin Scorsese, porque así, de primeras, si nos plantan imágenes de la peli y nos obligan a adivinar el nombre del director, probablemente mencionaríamos a muchos, muchos antes que Scorsese, es más, me atrevo a decir que jamás pensaríamos que el artífice de obras maestras como Toro salvaje o Uno de los nuestros está detrás de tremenda superproducción. Pero así es. Y lo que es también es que parece que hacer Hugo no es ningún descrédito. La crítica se encuentra enamorada de la película y la industria no ha hecho más que nominarla (y premiarla) a la mayoría de premios de la temporada, de hecho es la favorita a los Oscar del domingo con 11 nominaciones. ¿Estamos ante una obra maestra? Si La edad de la inocencia ya nos desconcertó (y sorprendió para bien) dentro de la filmografía de Scorsese, ¿por qué iba a ser Hugo una excepción? La película está basada en el libro ilustrado de Brian Selznick The Invention of Hugo Cabret, publicado en 2008, y narra la fantástica aventura del Hugo del título, un niño solitario que tras perder a sus progenitores, vive escondido en una estación en el París de los años 30 arreglando relojes y acompañado de un enigmático robot. Toda su vida cambiará al conocer a la niña Isabelle, que posee una llave que encaja en el robot y que les abrirá las puertas a su mágico secreto. Digámoslo de una vez: Hugo es una declaración abierta y confesa de Scorsese al cine, al cine de siempre, a ese que nos hace soñar y rebosa magia por los cuatro costados, al cine tal y como lo entendíamos de pequeños; de ahí que ya no sorprenda tanto que el director haya emprendido tal aventura detrás de la cámara. El homenaje se pone de manifiesto en el mero hecho de que uno de los personajes principales es, nada más y nada menos, que el primer ilusionista y soñador del cine, George Méliès, al que da vida nada menos que un actorazo de la talla de Ben Kingsley. En el reparto se cuentan otras caras conocidas, aunque en papeles de soporte, como las de Jude Law, Sacha Baron Cohen, Emily Mortimer, Ray Winstone o Christopher Lee, que acompañan a la pareja de niños protagonistas, los desconocidos Asa Butterfield y Chloe Moretz. Que no os espante su preciosista envoltorio de cine familiar, pensad que se trata de Martin Scorsese y del amor al CINE.
El otro estreno interesante de la jornada también tiene presencia en los Oscar del domingo, aunque con tan sólo 2 nominaciones. Eso sí, de las gordas: actriz principal y actor secundario. Mi semana con Marilyn (My Week with Marilyn) supone el debut de Simon Curtis en la dirección y es otra adaptación, esta vez de los libros que Colin Clark escribió sobre el rodaje, en 1956, de El príncipe y la corista (The Prince and the Showgirl), de Laurence Olivier, donde él trabajó como ayudante de producción y que narran su experiencia en dicho rodaje al lado del mito erótico femenino más importante de la Historia del Cine y al que encarna (fabulosamente al parecer) una Michelle Williams que se ha granjeado la admiración general y se ha convertido en, probablemente, la actriz puntera de su generación (ésta de este año es su tercera nominación al Oscar y sólo cuenta con 31 años). La acompañan el veterano Kenneth Branagh dando vida al mito con el que tantas veces se le ha comparado por su apego común a la obra de William Shakespeare, Laurence Olivier, y Eddie Redmayne como Clark, en los papeles principales, aunque el elenco de secundarios incluye también a Judi Dench, Julia Ormond, Dougray Scott, Derek Jacobi y la joven Emma Watson, la Hermione de Harry Potter. La crítica no ha sido muy condescendiente con la labor de Curtis, pero sí que obligan a ver la cinta por la única e ineludible razón de contemplar el trabajo de Williams, que ya ha ganado el Globo de Oro en la categoría de Comedia o Musical.
De Francia llega Polisse, de Maïwenn Le Besco, una crónica de la rutina diaria de la unidad infantil del Departamento de Policía de París a través de los ojos de Fred, un policía rebelde, que se enamora de Melissa, una fotógrafa nombrada por el gobierno para colaborar con el cuerpo policial. La cinta es una de las más nominadas a los Premios César de este año (13 candidaturas) y ganó el Premio del Jurado en la pasada edición del Festival de Cannes. Palmarés que no impresiona a la crítica, que se muestra abiertamente dividida sin que nadie se atreva a proclamarla como una obra total. Todos coinciden en que Polisse posee demasiadas deficiencias de guión, en el desarrollo de tramas secundarias y de personajes, que hacen de su visionado más una carga que un placer.
Y como siempre, me dejo lo 'mejor' para el final. Esta semana llega a los cines la película que le va a otorgar a Nicolas Cage el dudoso honor de ser el protagonista de un segundo Estrellados en este blog: Ghost Rider: Espíritu de venganza (El motorista fantasma 2) (Ghost Rider 2: Spirit of Vengeance), de Mark Neveldine y Brian Taylor. La cosa va de que Johnny Blaze (Cage) se ha apartado del mundanal ruido con el fin de controlar sus deseos de venganza y sus poderes (¡malditos poderes!), pero acaba siendo localizado por un monje (!) que necesita su ayuda para encontrar a alguien antes de que el malo, viejo conocido de Blaze, los encuentre. (Cantar de grillos) No. No era un chiste. Es la premisa argumental de, digámoslo con todas sus letras, otro TRUÑO más. Voy a pecar de prejuicioso pero es que no he visto, ni ganas tengo, de ver la anterior adaptación del cómic de la que ésta cinta es secuela; y, por tanto, tampoco voy a acercarme al cine ni a no hacer zapping en televisión para ver ésta. Es que las imágenes promocionales ya dan grima, ¿o no? No le está yendo del todo mal en la taquilla USA y a buen seguro que arrasa en el box-office español y, aún así, iluso de mí, clamo al cielo: ¿¡por qué nos hacéis esto, señores de Hollywood!? ¿Era realmente necesaria esta secuela? En fin, que Cage sigue empeñado en no levantar cabeza y que, con justicia, se ha ganado un Estrellados para la próxima semana y esta vez en solitario. ¡Enhorabuena macho, porque eres un tío macho!
Dentro de la oferta, creo que está claro que no me perderé ni la de Scorsese ni tampoco ese portento interpretativo que es Michelle Williams, amén del retorno a la actualidad del genial Kenneth Branagh. ¿Y vosotros? Espero que no os dejéis engañar por la arrolladora campaña promocional del motorista fantasma ése de los cojones y tiréis a la basura 8 valiosos euros sólo para verle la calva (o el injerto) a Nicolas Cage.
Un saludo Sinvergüenzas ^^
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