Karra Elejalde regresa el viernes a los cines.

Repasamos la filmografía del actor cuando regresa a la comedia con "Ocho apellidos vascos".

Palmarés XXIII Premios de la Unión de Actores.

"Caníbal", de Manuel Martín Cuenca, una de las vencedoras con 2 premios.

17º Festival de Málaga. Cine Español.

La Sección Oficial está compuesta por 15 largometrajes muy esperados para este 2014.

17º Festival de Málaga. Cine Español.

Seis títulos integran la sección paralela, competitiva, Zonazine, el espacio independiente.

17º Festival de Málaga. Cine Español.

Málaga Premiere y Estrenos Especiales completan la oferta de novedades del certamen.

sábado, 30 de noviembre de 2013

María Barranco ganó su segundo Goya por "Las edades de Lulú" en un año con poca chicha.


Si ya venía siendo una insufrible constante el que no se dieran en nuestra cinematografía papeles suficientemente lucidos para nuestras actrices, el curso de 1990 degeneró en tal práctica hasta unos niveles vergonzosos, pues apenas hallamos papeles femeninos secundarios relevantes en la producción nacional de aquel año, no hablemos ya de trabajos que superen la incómoda discreción. La composición de dicha categoría a los Premios Goya tuvo que conformarse con la inclusión entre las finalistas de algún que otro trabajo en modo alguno remarcable, que para nada resulta reprochable a tenor del nivel medio de algunas olvidadas. Eso sí, como siempre hay excepciones, es obligado destacar el injusto olvido de Eulalia Ramón, por su trabajo en Las cartas de Alou, de Montxo Armendáriz, una interpretación que hubiera dado lustre a una categoría que, atendiendo a sus nominadas, ganó justamente quien más lo merecía.


Tiene mérito ganar tu segundo Goya por un título cuyo escabrosismo se halla a estas alturas completamente desfasado y su sentido del erotismo parece de manual, como lo es la adaptación del best seller de Almudena Grandes, que la propia autora llevó a cabo junto a un Bigas Luna en alarmantes horas bajas. El papel de la travesti Eli es el más redondo de toda la función de Las edades de Lulú y más por la acertada exposición que de él lleva a cabo en la película su intérprete que por un detallado dibujo del mismo. Nada más lejos de la realidad, pues el personaje se encuentra descrito con trazo grueso y solo la entrega de María Barranco lo eleva muy por encima del pobre nivel de una película que, además, cuenta con dos importantes lastres en el trabajo de su pareja protagonista. A diferencia de ellos, en su corta intervención, la Barranco se hace imperecedera, afrontando el estereotipo de su rol desde el efectivo, por fresco, desinhibido y alocado, registro que la había hecho popular, pero logrando además dotar de no poca carga trágica a su escena cumbre del trío frustrado con los protagonistas. Todo un acierto el del director el de focalizar la atención de la cámara en el minucioso y expresivo trabajo de María Barranco a lo largo de esa dolorosa masturbación, pasando por alto la presencia en la escena de los otros dos intérpretes. La afortunada gravedad que emplea para su trabajo vocal ayuda a dejar bien claro el esforzado trabajo en la construcción del personaje llevado a cabo por la actriz, que acomete con contundente verosimilitud y desbordante naturalidad la arriesgada exposición física de su personaje, en secuencias nada amigas de tabúes o prejuicios. Por lo que cabe destacar también que el Goya vino a premiar como se merecía el tremendo ejercicio de valentía efectuado por la actriz en un papel en modo alguno convencional.


Ante el bajo nivel en la interpretación femenina de reparto ofrecido por la cosecha de 1990, no desentona entre las finalistas la nueva colaboración de esta barcelonesa con el director manchego tras Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988), en la que definitivamente se asentó el 'tipo' en el que mejor parece encajar la personalidad de la actriz. En la piel de Lola, la hermana productora de la protagonista, Loles León desplegó con inteligencia toda su desenvoltura espontánea, dando forma a una mujer temperamental y elemental, gritona, casi populachera, muy acorde a las necesidades estrafalarias propias del universo almodovariano, tan conocido por todos. Brilla el trabajo de Loles León cuando responde con absoluta entrega y convicción a estas premisas de surrealismo "kistch", como en el descacharrante número musical que protagoniza con poco disimulado entusiasmo, o cuando va soltando por la escena las "paridas" verbales dispuestas a lo largo de su intervención con una inimitable aprehensión de lo vulgar y lo chabacano, de divertidísima resolución. Mostrándose igualmente competente cada vez que su personaje entra dentro de la trama principal del filme, aunque sin el fulgor extravagante exhibido en la otra parte, sí al menos irradiando una naturalidad realmente estimulante. Lastra el resultado final de su actuación la sensación de que no ha habido trabajo alguno de composición del personaje por parte de la actriz, sino que toda su labor se ha sustentado en una plasmación milimétrica de la exuberante frescura propia de la intérprete y que, por tanto, estamos ante un trabajo de fácil ejecución, tocado por la incontestable gracia con la que Loles León sabe decorar cada empresa que ejecuta. Sin menospreciar las cualidades interpretativas de la actriz, lo cierto es que necesitaría de cometidos menos bidimensionales como éste para lograr convencer en registros más ambiciosos que el desplegado con aplomo y plenitud en ¡Átame!.


La tercera en discordia resultó ser el miembro más joven de la familia Flores, Rosario Flores, que a diferencia de sus progenitores y sus hermanos, parecía por aquél entonces decantarse por el mundo de la interpretación en detrimento de la faceta musical, sin duda, la gran baza familiar. Con una todavía incipiente filmografía, en la que ya había incluso asumido el riesgo de interpretar a una lesbiana en la fallida Calé (1987), de Carlos Serrano, y ser dirigida por el interesante Francisco Regueiro en Diario de invierno (1988), su nominación al Goya sirvió para confirmar la categoría semi-estelar de la que disfrutaba en la industria, pero tras el visionado de Contra el viento, de Paco Periñán, resulta obligado reconocer lo desproporcionado de tal hecho. Pues, aún reconociendo que la actriz lleva a cabo un aplicado trabajo dentro de esa incestuosa trama que plantea la película, incorporando con no poca dulzura y encanto el papel de la joven y atenta novia del protagonista, ni su fresca presencia, ni su indudable carisma racial, ni su extraña y peculiar cinegenia, logran elevar del lugar común al que finalmente queda reducido su trabajo, por culpa de una puesta en escena lánguida y deficiente en la que, eso sí, Rosario Flores logra comerse enteritos a la desnaturalizada pareja protagonista.

Las Olvidadas.


Estupenda actriz bastante desaprovechada por nuestra cinematografía, carente de eso tan necesario para acceder a papeles de gran envergadura como era (y sigue siendo) el éxito popular a gran escala, Eulalia Ramón logró en la quinta edición de los Premios Goya alzarse como una de las máximas favoritas en la categoría a la mejor actriz secundaria gracias al éxito obtenido por Las cartas de Alou, de Montxo Armendáriz, en el Festival de San Sebastián. Sin embargo, su bonita y serena interpretación se quedó finalmente fuera de la terna, convirtiéndose así en la gran olvidada en dicha categoría. Sobre todo, por significar con su sola presencia toda la luz y la calidez que posee la cinta, narrada desde una óptica algo gélida. Su Carmen, la chica gentil y amigable que acabará enamorando al inmigrante protagonista de la cinta de Armendáriz, irradia en todo momento felices sensaciones, precisamente por el trabajo de Ramón, tierno y cercano, emprendido con notable sencillez, tanta que sin alardes de ningún tipo, logra convencernos rápido, a través de su mirada y su preciosa sonrisa, de la atracción surgida en su personaje, quizás uno de los pocos elementos de todo el filme que no se aprecia tratado de un modo superficial.


En La teranyina (La telaraña), de Antoni Verdager, Anna Lizarán, premiadísima y reputada actriz teatral, regresaba a la gran pantalla para aportar con su sola presencia gotas de indudable calidad interpretativa. Presente solo en unas pocas, contadas, secuencias, daba vida a la criada entregada del abogado de la familia protagonista, los Rigau, al que daba vida Sergi Mateu. Con muy pocos elementos, Lizarán logra transmitir ante la cámara la devoción ciega que le inspira su señor, así como la humilde y servicial humillación a la que no le importa prestarse casi a menudo. Apoyándose sólo en el hábil uso de su mirada, la actriz consigue captar la atención del espectador, a pesar de significar tan poco su papel desde un punto de vista argumental. Incluso, se hace imborrable en la sádica y denigrante entrega que protagoniza ante su amo en la, claramente, gran escena que protagoniza. Con tan pocos trabajos femeninos remarcables en aquel curso cinematográfico, es obligado hablar de la ajustada y breve composición de Anna Lizarán en La telaraña entre las olvidadas al Goya en la categoría secundaria.


Actriz también eminentemente teatral, hacia finales de los ochenta y principios de los noventa, Rosa Novell frecuentó el cine español en películas de no pocas aspiraciones industriales y/o artísticas. Fue el caso de Lo más natural, de Josefina Molina, que se benefició de su corta pero estimulante presencia como la secretaria y amante del hermano de la protagonista, en un cometido minúsculo, que la actriz supo aprovechar al máximo para erigirse en una de las virtudes a reseñar del filme. Sin conseguir sacar de la bidimensionalidad y el esquematismo a su personaje, Novell sí ganaba puntos al dotar a sus intervenciones de una puntillosa acidez y un cinismo irresistible, logrando que el espíritu feminista de su personaje se libere de la pesada y fatua moralina que lo recorre y que se cae sobre su propio peso en la última secuencia que protagoniza. La inteligencia y la independencia de la actriz salvan, en última instancia, su trabajo y, en virtud del ya mencionado escaso nivel competitivo en trabajos femeninos secundarios acaecidos en 1990, se podría hablar de ella como de una de las olvidadas al Goya en esta categoría.

viernes, 29 de noviembre de 2013

"La vida inesperada", con Javier Cámara y Raúl Arévalo, también aterriza en enero.


La vida inesperada, la (valga la redundancia) esperada segunda película de Jorge Torregrossa, verá la luz en las salas comerciales el próximo 31 de enero del 2014, después de barajarse como fecha de su estreno el 13 de diciembre. Rodada en Nueva York, La vida inesperada es una comedia dramática alrededor de Juanito, un español residente en la gran metrópoli americana a donde su mudó hace años persiguiendo su sueño de triunfar como actor. El tiempo ha pasado, no ha conseguido lo que esperaba y se gana la vida trabajando en lo que puede. Inesperadamente se presenta de visita su primo, aparentemente triunfador y que tiene “todo lo que uno espera tener”. Sin embargo la convivencia va revelando la realidad que hay detrás de cada uno de ellos. La vida inesperada nos cuenta en clave de comedia cómo el azar nos abre puertas que jamás habríamos imaginado y cómo nuestro destino final depende de si nos atrevemos o no a traspasarlas.


Con 17 candidaturas previas a los próximos Premios Goya 2014, la cinta supone el cuarto protagonismo cinematográfico del año para Javier Cámara, esta vez convenientemente secundado por Raúl Arévalo y Carmen Ruiz. Todavía sin tráiler ni póster promocional, sólo se han hecho públicas unas pocas imágenes. En ActoresSinVergüenza estaremos muy atentos a las novedades que puedan originarse de este interesante estreno.


Negocios sucios: se estrenan "Diamantes negros", "Viral" y "Alaba zintzoa (La buena hija)".

¡¡¡Ya es viernes!!! Concluimos este concurrido mes de noviembre, cinematográficamente hablando, con la llegada a las salas de un par de títulos bastante esperados, justo después de conocerse la lista de las 136 películas que lucharán por convencer a los académicos y obtener alguna de las preciadas nominaciones a los Premios Goya, una semana después de conocer también la creación de los Premios Feroz, vamos, los premios de la crítica especializada o, si lo prefieren, los Globos de Oro españoles y cuyos nominados conoceremos en diciembre, con lo que se dará el pistoletazo de salida oficial a la temporada de premios nacionales de cine. ¿Rascarán algo las películas que llegan hoy a las salas? Por si acaso, teniendo en cuenta sus limitados estrenos, yo no me las perdería.

La peli del finde.


Tras muchos meses de espera desde que abandonara el último Festival de Málaga dejando muy buenas impresiones en la prensa especializada y portando el Premio del Público, llega a las salas, rodeada de no poca expectación, Diamantes negros, la película que podría significar la confirmación definitiva como director de Miguel Alcantud, tras su desigual ópera prima Impulsos (2002) y el thriller, aún sin estrenar en nuestro país, Anastezsi (2007). Con ésta que ahora nos ocupa, abandona el cine de género para abordar una realidad social que, hasta ahora, no había sido llevada a la gran pantalla: el tráfico de personas que maneja en la sombra el negocio del fútbol. Para ello, Alcantud se inspira en una historia real y narra el viaje de Amadou y Moussa, que son captados en Mali por un ojeador de fútbol, separados de sus familias y llevados a Madrid para triunfar. Vivirán entonces un periplo por España, Portugal y el norte de Europa que les enseñará de primera mano las sombras del deporte rey.

Con 19 candidaturas previas a los Premios Goya, Diamantes negros está protagonizada por los actores no profesionales Setigui Diallo y Hamidou Samake y cuenta con rostros conocidos de nuestro star system en papeles secundarios, como son Guillermo Toledo y Carlos Bardem, y las participaciones de los televisivos Santiago Molero y Raúl Tejón, así como también ofrece la oportunidad de reencontrarnos con la actriz Ana Risueño. Además, otorga un destacado papel para el productor de la cinta, el italiano Carlo D'Ursi. El filme puede adscribirse fácilmente al cine de denuncia, pues la intención última de Diamantes negros no es otra que denunciar el trafficking, término con el que se designa la práctica de muchos clubes europeos de contratar a menores de edad de fuera de Europa, en contra de las normas establecidas por la FIFA.


La crítica se ha volcado con la propuesta. Así lo manifiesta, por ejemplo, Fotogramas, en donde Mirito Torreiro escribe que Diamantes negros supone una película "honesta, limpia en sus planteamientos, va directa al grano, denuncia sin estridencias, pero también sin que le tiemble el pulso. Tan interesante como inédita". También en Cinemanía, Carlos Marañón alaba la película de Alcantud: "contada a pie de campo, de barrio y hasta de vertedero, la mirada cruda, sin concesiones, del filme se centra en lo esencial: el trabajo de los dos protagonistas africanos, intuitivos debutantes frente a las jugosas (y breves) apariciones de actores de prestigio (Carlos Bardem, Guillermo Toledo, Ana Risueño), un contraste que actúa como altavoz de verosimilitud para la denuncia más honesta del cine español reciente". En El Antepenúltimo Mohicano, sin embargo, matizan las virtudes de la película: "Diamantes negros es una cinta que íbamos necesitando. Porque aunque se puedan poner en entredicho varios de sus enfoques, o la falta de sutilidad de todo el conjunto, está bien que alguien haya verbalizado las cuestiones que aquí se plantean de forma clara y a gritos".

Paranormal Fnac.


La buena salud del fantástico nacional se nutre hoy del estreno en salas de Viral, ópera prima de Lucas Figueroa, que se acoge al tan demandado y agradecido por el público esquema de thriller paranormal para contarnos la historia de Raúl, un joven de 25 años, que resulta elegido para protagonizar un concurso sin precedentes: tendrá que vivir una semana en el edificio FNAC de la plaza de Callao en Madrid, de donde no podrá salir bajo ningún concepto. Su único contacto con el exterior será a través de las redes sociales. Su objetivo: conseguir 100.000 fans. Sin embargo, muy pronto, ganar no será su única meta: además de intentar conquistar a Lucía (una de las cajeras, de la que está enamorado) y superar su miedo patológico a los espacios cerrados, Raúl tendrá que enfrentarse a los inquietantes sucesos que tienen lugar en el interior de la tienda por las noches.

Con un reparto de jóvenes y guapas caras conocidas de la pequeña pantalla (Juan Blanco, Aura Garrido, Dafne Fernández, Miguel Ángel Muñoz y Pablo Rivero), a los que secundan los veteranos Pedro Casablanc, Enrique Villén y Amparo Valle, Viral decepcionó a la prensa a su paso por el Festival de Málaga, donde concurrió en la sección paralela Zonazine. No obstante, la película, que apuesta como método de financiación por la utilización del product placement publicitario, presenta nada menos que 18 candidaturas a los próximos Premios Goya. Sin embargo, a su llegada a las salas la vuelven a acompañar opiniones reguleras, como la que encontramos en Cinema Bites, donde señalan que el principal "mérito radica en rodar todo el metraje en un único lugar y no caer en la monotonía y después utilizar una localización tan emblemática como es la Fnac de Madrid para construir una historia de suspense sin caer en el ridículo".


En Cine y Bso atajan señalando que "Viral acaba flojeando algo que empezó muy bien". Peor opinión les merece a El Blog de Cine: "es una lástima que Lucas Figueroa no haya apostado abiertamente por abordar Viral como una peculiar comedia romántica, ya que esa faceta de la película donde realmente encontramos ciertos elementos redentores para una obra que fracasa con estrépito siempre que quiere que el, por llamarlo de alguna manera, lado más terrorífico pasa al primer plano". Mucho más demoledores se muestran en La Butaca: "la soporífera aventura (...) tiene una eficacia prácticamente nula a la hora de jugar con el espectador al escondite de caracteres con misterio misterioso de por medio, y demuestra poco tino para reflejar con sano cinismo el absurdo mundo en que vivimos". Por no hablar de El Antepenúltimo Mohicano: "una cinta divertidísima, aunque no por las razones esperadas. Tomando prestada la expresión de un amigo, es el ejemplo materializado de lo que es “el nuevo cine de marca blanca”, el nuevo mundo publicitario que está floreciendo en el centro de Madrid. Se ha abierto la veda para un cine español (otro más) situado en las antípodas de la filosofía creativa que ha surgido con fuerza en los últimos meses, de manos de cineastas con mayor humildad y talento.

¿Hija buena?


Casi de tapadillo, con solo 8 copias, estrena Barton Films Alaba zintzoa (La buena hija), que supone el regreso a la dirección de Javier Rebollo, director de Marujas asesinas (2001) -no confundir, por tanto, con el otro Javier Rebollo, el director de El muerto y ser feliz (2012)-, esta vez compartiendo tareas con el debutante cortometrajista Alvar Gordejuela, de quien parte también el guión, junto a María Eugenia Salaverri, de esta película en la que se nos narra la historia de Susana, una joven limpiadora del hogar que ocupa la casa de una de sus patronas cuando ésta se va de viaje. La muchacha sólo pretende huir de sus muchos problemas y disfrutar de los placeres que alegran la vida de los ricos. Pero lo que comienza siendo una inocente travesura, más tarde se complica con consecuencias dramáticas. Con la producción de Karambola Producciones, Alaba Zintzoa cuenta con la colaboración de ETB y del Departamento de Educación, Política Lingüística y Cultura del Gobierno vasco y la participación de Euskaltel.

Protagonizada por un elenco desconocido por el gran público, Leire Ucha, Aitziber Garmendia, Zorion Eguileor, Itziar Lazkano, Mikel Losada, Lander Otaola y Yannick Vergara, La buena hija sólo se podrá ver en las tres capitales vascas, además de Pamplona, Madrid y Barcelona. Y, según los guionistas, Alaba Zintzoa "tiene una sólida base documental y algunas de las secuencias y personajes más extraordinarios y llamativos de la película están basados en personajes y situaciones reales". No obstante, advierten de que "al ser llevados al cine adquieren unas dimensiones distintas, hasta el punto de que pueden parecer fantásticas, como si fueran producto de la imaginación de los guionistas y no de la vida real". A la fecha de esta publicación, nos ha sido imposible encontrar alguna crítica sobre ella.


Hasta aquí el repaso a los estrenos de ficción españoles de este finde, en el que también se deja caer por la cartelera nuestra pareja artística más internacional: Penélope Cruz y Javier Bardem, que forman parte del parpadeante elenco de The Counselor (El consejero), de Ridley Scott.

¡¡Un saludo, Sinvergüenzas!!

jueves, 28 de noviembre de 2013

"Pensé que iba a haber fiesta", duelo entre Elena Anaya y Valeria Bertuccelli para el próximo enero.


El próximo 10 de enero de 2014 llegará a las salas comerciales Pensé que iba a haber fiesta, tercer largometraje como directora y guionista de Victoria Galardi, co-directora de Amorosa Soledad (2007) y Cerro Bayo (2010), ganadora del premio Otra Mirada-TVE en el Festival de San Sebastián. Precisamente, en la última edición de este festival ya se pudo visionar esta Pensé que iba a haber fiesta, película protagonizada por Elena Anaya y Valeria Bertuccelli, y producida por Gale Cine, la productora de la realizadora, Fernando Trueba PC y Magma Cine.


Se trata de una comedia dramática en la que Ana (Elena Anaya) comienza una relación apasionada con el exmarido de su íntima amiga Lucía (Valeria Bertuccelli), mientras cuida de su casa y su hija durante unas vacaciones. Han pasado más de cuatro años desde la separación pero ¿por cuánto tiempo la expareja de una amiga es alguien intocable? Según el material para la prensa dispuesto por su distribuidora, Caramel Films, en Pensé que iba a haber fiesta la directora nos narra un drama con toques de comedia donde el eje principal está puesto en los personajes, sobre todo en esas dos amigas, esas dos mujeres diferentes e iguales a la vez, complejas, competitivas, adorables, inseguras... Se trata, pues, de una película sobre la búsqueda del amor, la amistad, la soledad, los miedos, la culpa y el universo femenino. 


La cinta, que cuenta con la colaboración del INCAA y el ICAA, así como también con la participación de TVE, ha recibido muy buenas críticas para su pareja artística protagonista y cuenta con 16 candidaturas previas a los próximos Premios Goya, incluidas las de mejor película, dirección y guión original, así como menciones para sus dos actrices: Anaya en principal y Bertuccelli como secundaria.



Premios Goya 2014: candidatas a la Mejor Actriz Protagonista.


Llegamos al final del repaso por las candidaturas interpretativas pre-seleccionadas para competir en los próximos Premios Goya con la lista a la mejor interpretación femenina protagonista. Tal y como deseábamos en nuestra última quiniela, Marian Álvarez, una de las dos grandes favoritas en este apartado ha sido ratificada como principal y no como revelación, como muchos auguraban. Así, la protagonista de La herida sigue liderando el ránking a la mejor actriz, muy bien acompañada por la estupenda Nora Navas de Tots volem el millor per a ella (Todos queremos lo mejor para ella).


Con Maribel Verdú fuera de esta competición, el tercer y cuarto puesto siguen disputándoselo Aura Garrido, por Stockholm (aunque también figure candidata por Viral), Candela Peña, por Ayer no termina nunca, Inma Cuesta, por Tres bodas de másMarta Etura, por Presentimientos, y Belén Rueda, por Ismael (candidata también, aunque sin opciones, por Séptimo).


Menos opciones parecen tener Ingrid Rubio, por La Estrella, Carmen Maura, por Las brujas de Zugarramurdi, o Ariadna Gil, por Sola contigo. Aunque no tan pocas como las que se barajan para Adriana Ugarte, por Combustión, María Valverde, por La mula, y, sobre todo, para las actrices propuestas por Al final todos mueren (Andrea Duro, Manuela Vellés y Teresa Soria Ruano) o las seleccionadas por El amor no es lo que era (Blanca Romero, Petra Martínez Aida Folch), todas ellas en papeles demasiado pequeños como para ser consideradas protagonistas.

Las sorpresas.


La principal es la inclusión en esta categoría de Lola Dueñas, por Los amantes pasajeros, perdiendo la cinta de Almodóvar las pocas opciones que tenía ya de conseguir una nominación para la actriz, que si tenía posibilidades era como secundaria. Dueñas, además, también figura candidata por 10.000 noches en ninguna parte.


Lo mismo sucede con Claudia Bassols y Fionnula Flanagan, incomprensiblemente propuestas como protagonistas por Menú degustación, cuando sus opciones reales de lograr nominación estaban en la categoría revelación, para la primera, y secundaria, para la segunda.


Tanto Ana Fernández, por Casi inocentes, como Lydia Bosch, por La hermandad, podrían sumarse a las actrices con posibilidades en esta categoría. Aunque no tanto como Elena Anaya, que se sube al carro de las favoritas con su inesperada selección por Pensé que iba a haber fiesta.


Tampoco habría que perder de vista la sorprendente candidatura de la enorme Vicky Peña, por Una merienda en Ginebra, sorprendente por tratarse de un filme destinado a la televisión. Sin embargo, las críticas hacia el trabajo de la actriz hablan de maestría absoluta, lo que convierte a Vicky Peña en una rival bastante seria.


Premios Goya 2014: candidatos al Mejor Actor Protagonista.


La pre-selección de candidatos al mejor actor, más que despejar dudas, ofrece aún mayor intriga sobre quienes podrían llegar a la final por el Goya. Los tres favoritos claros siguen siéndolo, pero las candidaturas inesperadas de otros tantos podrían hacer tambalear los cimientos en una categoría que muchos considerábamos cantada.


Para empezar, el gran favorito, Javier Cámara, ha sido propuesto como protagonista nada menos que por cuatro títulos, Los amantes pasajeros, Ayer no termina nunca, Vivir es fácil con lo ojos cerrados y, por la aún sin estrenar, La vida inesperada (la cinta con la que preveíamos podría ser el favorito en la edición del año que viene). El reparto de votos entre los cuatro trabajos puede restarle puntos y favorecer a sus competidores, como Antonio de la Torre, por Caníbal (que podría obtener doble nominación, pues figura candidato como secundario por La gran familia española), y Eduard Fernández, por Todas las mujeres.


En un drástico error de perspectiva, los responsables de Las brujas de Zugarramurdi han propuesto a Mario Casas como protagonista (compitiendo además con su compañero, Hugo Silva), lo que da al traste con las opciones que muchos barajaban de una doble nominación: como secundario por ésta y como principal por La mula o Ismael. Hasta cuatro veces aparece también el nombre de Quim Gutiérrez, aunque sus opciones no sean fuertes ni por Tres bodas de más o Los últimos días, podría dar la sorpresa con ¿Quién mató a Bambi? y, sobre todo, La gran familia española.


Álex González, aunque figure candidato por Combustión, tiene sus verdaderas opciones en su candidatura por Alacrán enamorado. Lo mismo con Ricardo Darín, que tiene en Tesis sobre un homicidio su gran baza, en detrimento de Séptimo.


Y no menospreciemos las posibilidades de ser finalmente nominados que también tienen Ernesto Alterio, por ¿Quién mató a Bambi?, Eduardo Noriega, por Presentimientos, o el veterano Manolo Zarzo, que ha obtenido dos candidaturas, por Blockbuster y Serie B.

Las sorpresas.


La mayor de ellas ha sido la inclusión en esta categoría de uno de los grandes favoritos al mejor actor de reparto, Tito Valverde, por 15 años y un día, que podría quedarse sin su merecida nominación por culpa de la enorme competencia presente en esta categoría principal. Eso sí, sus opciones siguen siendo fuertes y su selección ofrece a la carrera por los Goya aún más emoción.


Un suicido es lo que representan las candidaturas de Ismael Fristchi y Alejandro Albarracín como principales por Al final todos mueren, frente a tan dura competencia y con papeles tan breves y en una película que apenas vio nadie. Sobre todo, Fritschi hubiera tenido opciones de haber sido propuesto como revelación.


Como De la Torre, también Fernando Cayo, Jan Cornet y Alberto Ammann podrían ganar una doble nominación, pues son candidatos como principales y secundarios por varias películas. Cayo es candidato por Esto no es una cita, como secundario, y Casi inocentes, como principal. Cornet lo hace por Barcelona, noche de verano (secundario) y Menú degustación (principal). Y Ammann, por Tesis sobre un homicidio (secundario) y Combustión (principal).


Nos complace mucho también la inclusión del estupendo trabajo de Àlex Brendemühl en El médico alemán. Wakolda, co-producción entre Argentina y España que sólo teníamos en cuenta en la correspondiente categoría de mejor película iberoamericana.


Por último, como todos los años, vuelven a figurar entre los posibles candidatos nombres destacados del cine internacional, como el legendario Robert Duvall, por A Night in Old Mexico, o Elijah Wood, por Grand Piano.



Premios Goya 2014: candidatas a la Mejor Actriz Secundaria.


La categoría equivalente a la mejor interpretación femenina de reparto nos ha proporcionado otra de las grandes sorpresas para la presente edición de los Premios Goya y, de nuevo, vuelve a tener a la película 15 años y un día como protagonista. Se trata de la mención de Maribel Verdú como secundaria y no como principal, tal y como nosotros barajábamos. De este modo, la Verdú se asegura una más que posible nominación, pues la competencia en la categoría protagonista nos hacía pensar que al final se quedaría fuera de las nominaciones. La parte mala del asunto es que su presencia entre las actrices de reparto restará opciones a su compañera en el filme, Susi Sánchez, candidata a su vez por su alabado trabajo en 10.000 noches en ninguna parte.


De nuestras favoritas en la última quiniela, prácticamente todas han sido ratificadas en la categoría, comenzando por la gran favorita Terele Pávez, por Las brujas de Zugarramurdi, cinta que también propone los nombres de Carolina Bang y Macarena Gómez, ésta además con doble candidatura, también por Al final todos mueren. Todas las mujeres tiene cuatro opciones a conseguir una nominación, con Nathalie Poza, Marta Larralde, Petra Martínez y Michelle Jenner.


Con una menos cuenta ¿Quien mató a Bambi?, por la que figuran propuestas Clara Lago, Úrsula Corberó y la gran baza de la película, Carmina Barrios. Tres son también las representantes de Los ilusos: Aura Garrido, Isabelle Stoffel y Mikele Urroz.


 Tots volem el millor per a ella (Todos queremos lo mejor para ella) presenta las candidaturas de dos actrices, Clara Segura y Àgata Roca. Sorprendentemente, las mismas que proponen desde El Deseo por Los amantes pasajeros (Cecilia Roth y Blanca Suárez).


Otras con posibles son Verónica Echegui, por La gran familia española, Rosana Pastor, por La herida, y María Botto y, sobre todo, Rossy de Palma, por Tres bodas de más. A diferencia de las testimoniales apariciones en la lista de Carmen Machi, por La Estrella, Vicenta Ndongo, por Menú degustación, María Alfonsa Rosso, por Caníbal, y Ana Risueño, por Diamantes negros.

Las sorpresas.


Aparte de la mencionada inclusión de la Verdú, destaca la presencia de películas aún sin estreno confirmado como 10.000 noches en ninguna parte, con candidaturas para Susi Sánchez y Najwa Nimri, o La vida inesperada, que propone a Carmen Ruiz y Gloria Muñoz, ésta también seleccionada por Presentimientos.


Como también el que un título que considerábamos del año pasado concurra en esta edición, como Memorias de mis putas tristes, por la que son propuestas las veteranas Ángela Molina y Geraldine Chaplin, quien también figura en la lista por Tres-60.


Sorprende también la inclusión de la estupenda Cristina Plazas por un título destinado principalmente para la televisión, como Una merienda en Ginebra. Y la ausencia de Valeria Bertuccelli entre las propuestas por Todos queremos lo mejor para ella, aunque la estrella argentina figura en la lista con Pensé que iba a haber fiesta.


Ni María Molins, por Hijo de Caín, ni Susi Sánchez, por La fotógrafa, ni ninguna representantte de la reciente Temporal, aparecen en esta primera ronda, al no ser incluidas entre las candidatas sus respectivas películas.


Premios Goya 2014: candidatos al Mejor Actor Secundario.


Más de cien candidatos figuran en la lista de posibles finalistas al Goya al mejor actor de reparto del 2014. Es, de lejos, la categoría interpretativa más concurrida. Prácticamente todos los favoritos que barajábamos en nuestra última quiniela han obtenido su correspondiente mención por parte de los productores de sus respectivas cintas. De todos ellos, el que parece ser un finalista asegurado es Ramón Fontserè, por Vivir es fácil con los ojos cerradosCarlos Bardem también lo tendrá fácil con Alacrán enamorado, aunque también figure designado por su trabajo en Diamantes negros.


Las brujas de Zugarramurdi podría ganar tres nominaciones en esta categoría, aunque quien más posibilidades tiene es Enrique Villén, por delante de Pepón Nieto y Secun de la Rosa. Las mismas opciones presenta La gran familia española, con menciones para Héctor Colomé, Antonio de la Torre y Roberto Álamo. Mientras que la otra gran cinta coral del año, Los amantes pasajeros, sólo apuesta por dos de sus intérpretes al mejor actor de reparto: el favorito Carlos Areces y Raúl Arévalo.


La reciente ¿Quién mató a Bambi? también propone a tres actores: Julián Villagrán, Joaquín Núñez y Manolo Solo, éste con doble candidatura, pues también concurre con La herida, por la que también compite el reciente Premio Nacional de Teatro, Ramón Barea.


Los posibles repartos en los votos entre tanta competencia por las mismas películas, podrían resultar beneficiosas para los únicos representantes de otras cintas dignas de nominación en este apartado, como Pau Durà, por Tots volem il millor per a ella (Todos queremos lo mejor para ella), Ramón Madaula, por La por (El miedo), o, de nuevo Secun de la Rosa, por La mula.


Pero también podrían tener algo que decir al final los candidatos de Ismael, Sergi López y Juan Diego Botto, o el estupendo Jose Coronado de Los últimos días.


Contra todos ellos, parecen tener pocas opciones los seis candidatos presentados por Al final todos mueren, los cuatro de la co-producción con México Colosio, el asesinato, o los nada menos que nueve propuestos por Un dios prohibido.

Las sorpresas.

La mayor sorpresa ha sido, sin duda, la ausencia en esta categoría de uno de los máximos favoritos, Tito Valverde, por 15 años y un día, que sus responsables colocan en la categoría principal, restándole así posibilidades de resultar finalmente nominado.


La inclusión de Raúl Arévalo, por La vida inesperada, y de Luis Tosar, por A Night in Old Mexico; dos cintas que preveíamos no concurrirían en la presente edición de los Premios Goya, sino en la del año que viene.


Tampoco nos esperábamos el olvido en todas las categorías de Hijo de Caín, que aquí poseía una buena baza en el trabajo de Jack Taylor, actor que, al menos, figura entre los candidatos por su cometido en Presentimientos.


Así como también la presencia entre los candidatos de estrellas extranjeras de la talla de John Cusack, por Grand PianoStephen Rea, por Menú degustación, o Brian Cox, por Mindscape.