Aprovecho la tan esperada, comentada y cercana ceremonia de los XXVI Premios Goya para traer del recuerdo otra de esas interpretaciones inolvidables presentes en la Historia del Cine Español. Y me refiero a la realizada por el malagueño (e internacional) Antonio Banderas en Átame!, su última colaboración con Pedro Almodóvar (hasta su reencuentro este año en La piel que habito), su primera nominación al Goya como Actor Principal. Este año vuelve a ser candidato y, a todas luces, parece que se quedará también sin cabezón en la que se contabiliza como su cuarta nominación (después de 15 años desde la tercera). No obstante, su buen hacer queda de sobra demostrado, aunque haya sido puesto en entredicho en numerosas ocasiones, a tenor de sus poco afortunados empeños en Hollywood. Sin temor a exageraciones, el protagonismo que Pedro Almodóvar regaló a su actor fetiche en aquél entonces supone la constatación del poderío cinematográfico del intérprete, erigiéndose desde ya en su mejor actuación.
sábado, 18 de febrero de 2012
viernes, 17 de febrero de 2012
¿Tiran las tetas de Halle Berry más que dos carretas?
¡Ahí están! ¡Ahí las tienen! Creo que no hacen falta palabras para describir el público y el alcance que ansían conseguir los creadores de Dark Tide, del acuático John Stockwell (a juzgar por su filmografía parece que sólo sabe mover la cámara bajo el líquido elemento, aunque también es el artífice de la última tontería de nuestra Paz Vega en Hollywood, Cat Run, fechada en 2011 y aún pendiente de estreno en Europa... ¿por qué será?). Pues a este tío parece que lo que le pone no ya sólo es meter la cámara en el agua, sino meter con ella a alguna tía buena de turno (por supuesto, con el bikini más diminuto posible) y hacerla pasar un mal rato. Vamos, que es una versión surfera de los maestros del Giallo italiano, lo que pasa es que donde allí había sangre y vísceras (de mentira, se notaba mogollón) como excusa para que los pivones de la época mostraran carnaza, aquí hay agua y tiburones para que, dentro de los márgenes permitidos por Hollywood, podamos ver también (o intuir mejor) carnaza de la buena.
Charlize Theron y Michael Fassbender, a las puertas del Oscar
¡¡Ya es viernes!! Malditas las ganas de que sea fin de
semana, se renueve la cartelera y lleguen a los cines nuevos títulos que ansío
ver cuando mi bolsillo está temblando de frío. Y es que estamos a mediados de
mes y no llego al final. De todos modos, no estoy aquí para soltaros este
rollo, está claro que tendré que administrarme mejor el mes que viene, ni
tampoco para daros un poquito de lástima que aunque lo que necesite sea una
buena ayuda económica, me conformo con que os hagáis asiduos al blog. Vamos a
repasar qué títulos desembarcan hoy en nuestros cines. Tenemos un poco de todo:
de nuevo, un par de superproducciones americanas para atontarnos el cerebro y
confirmarnos que las ideas hace mucho tiempo abandonaron Hollywood, menos mal
que también se estrena algún que otro filme, de menor ambición y mayor alcance,
así como alguna que otra propuesta europea para salvarnos del desastre.
jueves, 16 de febrero de 2012
Meryl Streep y Julia Roberts, madre e hija para los Weinstein
Repasando la filmografía de Meryl Streep estos días me he percatado de que a lo largo de estos más de 30 años de carrera cinematográfica la actriz ha compartido cartel con prácticamente la plana mayor de Hollywood, con casi todas las estrellas de renombre que a uno se le puedan pasar por la cabeza. Sin embargo, faltaba una. Y esa es la noticia del día: Harvey Weinstein, el todopoderoso productor, uno de los más influyentes en Hollywood, ha confirmado que reunirá en un mismo set de rodaje a la Streep con Julia Roberts para dar vida a una madre y su hija en la adaptación de la obra August: Osage County, de Tracy Letts, ganadora del Premio Pulitzer en 2008.
miércoles, 15 de febrero de 2012
El abuelo mítico de Fernando Fernán Gómez
Buscando en mi memoria cinéfila grandes interpretaciones he advertido que apenas he dedicado unas lineas a los intérpretes patrios. En estas estaba cuando se me ha venido a la cabeza El abuelo (1998), de José Luis Garci. Nada mejor para romper el hielo con la interpretación en el cine español que empezar recordando a uno de los mejores y más importantes actores de nuestro país, el insigne Fernando Fernán-Gómez, cuya filmografía está plagada de buenos, intensos y memorables papeles, sobre todo cuando en los noventa daba vida, con toda la autoridad que su persona merecía, a roles imperecederos.
martes, 14 de febrero de 2012
Meryl & Oscar, una historia de amor (III)
Cumplió los 50 y nos abandonó. Durante 3 años no la pudimos
ver en las pantallas, sólo nos dejó escuchar su voz en un papel secundario para
A.I. Inteligencia Artificial (Artificial
Intelligence: A.I.), de Steven
Spielberg. Y nosotros estuvimos a punto de tirarnos de los pelos de la
desesperación. ¿Qué había sido de aquélla costumbre suya de rodar una película
al año? ¿Por qué ese retiro extraño? ¿Le habría dado Hollywood la espalda
también a su más importante estrella femenina de las últimas dos décadas, a su
intérprete más completa? ¿De verdad no había papeles para Meryl Streep? Resulta
increíble. Sea por la razón que fuere, el tiempo transcurrido desde el estreno
de Música del corazón, en septiembre
de 1999, hasta la llegada de la esperadísima Las horas (The Hours), de Stephen
Daldry, en febrero de 2003, resultó ser un auténtico suplicio, una tortura
demasiado gratuita como para no buscar culpables.
lunes, 13 de febrero de 2012
¡¡¡Que Gary Oldman nos chupe la sangre!!!
Aprovechando la recién, esperada y merecidísima primera
nominación de Gary Oldman a los
Oscar gracias a El topo (Tinker Tailor
Soldier Spy), de Tomas Alfredson,
me he dejado llevar por el entusiasmo y he recuperado uno de los más laureados
y conocidos trabajos del intérprete inglés, el del mismísimo Conde Drácula en
la magna obra de Francis Ford Coppola.
Contaba con los 34 años cumplidos y ya había sorprendido, cinematográficamente
hablando, dando vida en los ochenta a dos personajes reales de la talla de Sid Vicious, el bajista del grupo Sex
Pistols, en Sid y Nancy, de Alex Cox, y al dramaturgo homosexual Joe Orton, en Ábrete de orejas (Prick Up Your Ears), de Stephen Frears. Viendo el resultado de su trabajo en Drácula de Bram Stoker (1992) sorprende
enterarse de que Oldman no fue la primera elección del director para el papel.
Coppola barajó todo tipo de nombres en Hollywood, desde su sobrino Nicolas Cage hasta reputados
intérpretes de la talla de Daniel
Day-Lewis, Alan Rickman o Gabriel Byrne, pasando incluso por Antonio Banderas.
domingo, 12 de febrero de 2012
Meryl & Oscar, una historia de amor (II)
Llegó a la década de los noventa bien asentada en una
posición bastante inusual para una actriz que recién había cumplido los 40
años. La industria, el público y buena parte de la crítica la estimaban como la
mejor actriz americana del momento. Su trayectoria esencialmente dramática en
los ochenta le había granjeado, además de ocho candidaturas al Oscar en un
intervalo de tiempo tan corto como diez años, infinidad de premios y
nominaciones por doquier. Es cierto que los noventa supusieron un resurgimiento
artístico para algunas de sus compañeras de generación (el caso más claro lo
protagoniza Susan Sarandon) o, por lo menos, un afianzamiento
profesional que las mantuvo trabajando a buen ritmo durante, por lo menos, la
mitad de la década (caso de Glenn Close,
Sigourney Weaver o Jessica Lange). Para Meryl Streep, que
se había ganado con creces ser la cabeza visible de esta generación de actrices
americanas, los noventa significaron un momento de calma. La actriz pareció
despreocuparse de hacer avanzar su trayectoria por la senda intensa y grandiosa
por la que la había dirigido en los ochenta y ‘cedió’ al puro entretenimiento.
No es en modo alguno reprochable que, tras el estatus obtenido, echara en falta
un poco de esparcimiento. El problema surge cuando durante esta tregua dramática la
Streep evidencia leves errores de elección.